
Es cierto que declaraciones fueron un tanto desafortunadas por parte de la cantante cuando le preguntaban por enésima vez por la famosa "cobra", y que por primera vez sacan a la mallorquina de sus casillas, tal vez, porque sabía que la siguiente pregunta iba a ser relacionada con la entrevista que ha realizado su padre biológico, José Carlos Corradini, tachándola de clasista ("Ellos viven en otra vida, en el jet set internacional. A lo mejor soy una persona que puede molestar para su estatus.") e hipócrita ("[...] alguien que pregona por el hambre de los chiquitos de África y se olvida del padre biológico... ") en tan solo la primera pregunta que se le realiza en 'LOC'.

Se lo voy a recordar: Paz, tú presentas un programa llamado 'Sálvame' donde comentáis actualidad y corazón, y al ser personajes públicos, sois muy esclavos de vuestras palabras.
En 'Sálvame' tú dijiste: "En 23 años de profesión, Malú ha sido la única persona que, yendo yo con una personita (su hija), le he pedido un autógrafo, me ha mirado y se ha ido. Me gusta verla en televisión y me gusta ver cómo canta, pero hija, es lo que hay" y "Bueno, yo no quiero ser más artista que nadie, pero puede ser que algún día ese público que está a las puertas de tu concierto ya no esté y entonces echarás mucho de menos ese beso o ese autógrafo que te pida". Y yo ahora, como telespectador, me pregunto: ¿Por qué en ese momento no aplicaste para Malú el mismo argumento con el que "defiendes" a Chenoa? ("No entiendo que a una artista que ha sido educada una y otra vez, ahora se la critique porque se cabree").
De nada, Paz Padilla.
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